Las imágenes que presentamos demuestran lo que los moradores del asentamiento humano Esperanza de Callería vienen alertando desde ayer: la violencia doméstica que padecen cuatro niños que viven en una casa de madera ubicada en el pasaje Perú, a 20 minutos del centro de Pucallpa.
El video revela que la madre de los menores llegó a amenazarlos con quemar sus cuerpos si la volvían a desobedecer. Según los vecinos de la zona, no sería la primera vez que se escuchan gritos e insultos desde la vivienda. “Los niños nunca dejan de llorar”, dijeron preocupados. Enterados de la denuncia publicada ayer por el diario Ímpetu, en torno al estado de abandono en el que se encuentran los pequeños, diversos especialistas de la Defensoría del Pueblo y del Centro de Emergencia Mujer se encuentran recabando información para realizar la intervención correspondiente.
La tarde del martes, representantes del Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables acudieron al lugar y confirmaron que los padres de los menores, en efecto, no se encontraban en casa y los niños habían sido abandonadas a su suerte. Al cierre de esta edición, se preparaba la denuncia correspondiente.
Como se recuerda, un grupo de pobladores del asentamiento denunció que los menores de edad vienen sufriendo maltratos físicos y psicológicos por lo menos desde el mes de enero. Sus propios padres, aseguran los vecinos, son los responsables de que los niños pasen hambre casi a diario y están abandonados a su suerte.
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